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La impresión 3D es una de las tendencias tecnológicas que más notoriedad está adquiriendo en los últimos meses. Se está expandiendo rápidamente por diversos sectores, desde la gastronomía hasta la salud. Las impresoras 3D parecen ser la nueva herramienta que llevará al mundo a la próxima gran revolución tecnológica.

Uno de los campos más asombrosos del 3D es el de la construcción. Holanda se podrá enorgullecer de ser uno de los primeros países en tener una casa creada mediante impresión 3D. De hecho, la construcción de este inmueble ya se ha puesto en marcha.

Con un diseño previo, materiales reciclados y la tecnología de impresión 3D, se materializará un edificio completamente habitable. Se trata de una forma de construcción mucho más ecológica, eficiente y rápida que la convencional.

Según afirma Hedwig Heisman, de DUS, el estudio de arquitectura encargado del proyecto, “esto podría revolucionar la forma en la que hacemos nuestras ciudades”. No podemos estar más de acuerdo.

China, por su parte, fabricó 10 casas en un día gracias a esta técnica. Además de reducir drásticamente el tiempo de construcción, el precio de las viviendas también desciende. La compañía que sustentó este proyecto, Shanghai WinSun Decoration Design Engineering Co, lleva años desarrollando y mejorando su sistema de construcción.

La impresora 3D de la mencionada compañía utiliza cemento a alta temperatura y fibra de vidrio como base de sus materiales, que va expulsando, capa por capa, hasta terminar la edificación.

En este vídeo podemos ver cómo se construyen los materiales de los edificios:

En el futuro, ¿viviremos todos en casas hechas mediante impresión 3D? ¿Qué supondrá todo esto a nivel socio-económico? No lo sabemos. Lo que sí es seguro, es que la idea de poder entrar en una casa hecha con una impresora y poder pisar el suelo firme, es alucinante. ¿No creéis?